Si somos capaces de darle a nuestros hijos la oportunidad de equivocarse y empezar de nuevo y si tienen autonomía para ello, les estaremos ayudando a ser personas que manejen adecuadamente la frustración, seguras de si mismas, que no abandonan y persisten en sus propósitos.
9 claves para manejar la frustración en los niños:
- Dar Seguridad siendo congruentes entre lo que hacemos y lo que decimos (los niños lo imitan todo) y poner limites claros. Aprender a decir No, anticipando las normas y las consecuencias.
- No ceder ante las rabietas. El miedo del adulto al llanto hace que caigamos en sus demandas. La falta de tiempo y paciencia nos lo dificultan.
- Usar un lenguaje adecuado evitando palabras trágicas. “Terrible”, “caótico”, “desastre” generan una carga emocional negativa. Intentar usar términos más neutros y sin contenido emocional intenso. Evitar frases ambiguas y generales cuando pongamos una norma como “portarse bien”.
- Dar autonomía y responsabilidades. dejarle explorar, no hacerle todo.
- No temer a las experiencias nuevas por anticipación de fracaso. Ayudarle a encontrar soluciones creativas. Evitar que abandone por no enfrentarse a la insatisfacción. Enseñar a los niños a mantenerse en su empeño fortalece su determinación y constancia.
- Enseñarles a tomar decisiones asertivas. Revisar las posibles consecuencias a sus decisiones y ver con cual de ellas se compromete.
- Reconocer las emociones en la frustración y enseñarle a expresarlas. Es importante darse cuenta de cómo se siente y piensa cuando las cosas no son como quiere. Expresarlas ayuda al niño a evitar agresividad o resentimiento.
- Enseñarles a pedir ayuda. En ocasiones hay una reacción automática de los niños de gritar o tirar objetos cuando no han conseguido algo. No consideran la opción de pedir ayuda a un adulto. Es necesario que sepan que los adultos están ahí para ayudarles a pensar en una solución constructiva, no para solucionarlo por ellos. La rabia es un sentimiento normal al que hay que dar salida a través de la forma adecuada.
- Reforzar sus éxitos. “Ley del 4×1” Algunos expertos cuentan que por cada castigo necesitamos 4 recompensas para equilibrarnos de nuevo. Admitimos peor una critica que un halago. No sobre saturarles de castigos, juicios o criticas de forma innecesaria. Empeorará la situación. No infravalorar sus problemas.
En resumen, aunque nos cueste debemos darles la posibilidad de ser autónomos, de tomar decisiones, de explorar a solas sin juicios negativos, de equivocarse y de que gestionen adecuadamente sus fracasos. Así habremos conseguido que tengan un buen nivel de seguridad en sí mismos y, en consecuencia, aceptarán mejor los pequeños obstáculos de cada día.
En Smartick seguimos estas pautas: los niños deben hacer solos sus sesiones de 15 minutos, si se equivocan lo saben en el momento, trabajamos el refuerzo positivo y proponemos experiencias nuevas continuamente.
Para seguir aprendiendo:
- Ajedrez para niños: 3 principales razones para enseñarlo
- Descubre cómo enseñar a tomar decisiones
- El desarrollo de la atención y su relación con la regulación emocional
- TBL- Pensamiento Crítico. Cómo enseñar a pensar.
- Regulación emocional y conducta social en la niñez
- Familias monoparentales y retos en la educación - 23/10/2019
- Rol de los abuelos en la educación de sus nietos - 18/09/2019
- La importancia de aprender de los errores - 22/08/2019
Agradezco las recomendaciones, puesto que en casa existe mucha frustración para las matemáticas, estas estrategias me servirán de mucho. Buen día
Muy bueno, gracias, espero ampliarlo y que nos sirva de ayuda.