En estos tiempos que vivimos muchos nos preguntamos ¿qué mundo le vamos a dejar a nuestros hijos? Esta pregunta nos condena al inmovilismo, ya que cambiar el mundo es una tarea demasiado complicada. Sin embargo, aquellos que somos padres deberíamos cambiar la pregunta por ¿qué hijos vamos a dejar al mundo? Y de esta manera centrarnos en aquello que sí podemos hacer. Nuestros hijos son el mayor legado que podemos dejar al mundo y de nosotros depende educarlos. Esta es una reflexión que el profesor de secundaria José Carlos Aranda extrae de un artículo de Leopoldo Abadía y nos cuenta en su libro Inteligencia Natural.
En este ensayo publicado por la editorial Toromítico, su autor nos expone de manera sencilla y práctica un método para educar en la felicidad y no solo en el conocimiento: “no es tan importante educar genios como educar personas capaces de ser felices en la vida. Y es algo posible, necesario y urgente”.
A estas alturas todos sabemos que unos buenos resultados académicos no garantizan el éxito en la vida, ni siquiera son lo más importante. Sin embargo condicionan la convivencia en muchas familias. Muchos de nosotros conocemos casos de personas con expedientes brillantes que han fracasado en la vida y por el contrario, casos de alumnos con evaluaciones normales que sin embargo han triunfado y son felices.
En el libro se plantea la necesidad de que además de cuidar el desarrollo de la inteligencia a través del estudio y el colegio, seamos capaces de educar a personas positivas, capaces de ser felices y útiles, comprometidas consigo mismas. Capaces de resistir los fracasos y adaptarse a las circunstancias, capaces de comprender y comunicar sus pensamientos y emociones. Capaces en suma de ser felices.
El equilibrio entre inteligencias (cognitiva, emocional, social y moral) es la pieza clave del método que se propone para llegar a la inteligencia natural. Pero cada una de ellas evoluciona a un ritmo diferente, determina conductas, acciones y reacciones en las distintas etapas de crecimiento. Son imprescindibles pero comportan sus propios riesgos
El método de la inteligencia natural se basa en una técnica tan sencilla como estimular las capacidades y evitar limitaciones impuestas desde la negatividad, la inseguridad, la impotencia o la desesperanza. Y esto tanto en el desarrollo mental como físico. El autor va explicando etapa por etapa cómo lograrlo a través de la convivencia utilizando fórmulas sencillas y mucho sentido común. En definitiva, un libro que recupera la ilusión por educar.
Jose Carlos Aranda es Doctor en Filología Hispánica y profesor de Lengua Española y Literatura desde 1980. Entre sus publicaciones especializadas de carácter docente-pedagógico cabe destacar: Cómo se hace un comentario de texto (Berenice, 2009), Manual de ortografía y redacción (Berenice, 2010) y Manual de redacción para profesionales e internautas (Berenice, 2011).
Para seguir aprendiendo:
- El Capital Mental: qué es y por qué es importante.
- Ok Diario: una startup española enseña matemáticas en 70 países
- Smartick en Chile: cómo utilizar la inteligencia artificial en matemáticas
- Padres adictos al móvil. ¿Predicamos con el ejemplo?
- Conociendo más acerca de la inteligencia
- A estudiar también se aprende. Telva - 15/09/2013
- Alexander Calandra y la anécdota del barómetro - 07/08/2013
- Descubrir el mal de la escuela con Daniel Pennac - 22/07/2013
Agradezco la sinopsis y el cariño. Un saludo.