¿Te ha pasado que alguien trata de decirte algo, pero no lo comprendes del todo, o tú has querido expresar algo y no has logrado comunicar lo que querías o te han entendido algo muy distinto?
Posiblemente se deba a la falta de claridad. ¿Será posible aprender a ser claros cuando hablamos o escribimos? ¿Cómo podemos lograrlo?
En un principio, la claridad puede parecer como algo muy vago y difícil de enseñar, pero es cierto que en el día a día nos encontramos con comentarios que nos piden que digamos o escribamos de manera más clara.
Por ejemplo, cuando un amigo nos dice: ‘¿Qué has querido decir con eso? ‘ o un familiar nos dice: ‘¿Podrías explicarte mejor? ‘. Esto refleja que hay un fallo en la comunicación, el mensaje no se ha comprendido correctamente, y lo que realmente quieren decirnos es ‘No te he entendido bien, debes expresarte con más claridad, si es que quieres que te comprenda’.
Índice
¿Qué es la claridad?
En los colegios, muy a menudo se pide que los niños escriban (o hablen) con orden, que redacten sus ideas con cierta coherencia y que utilicen de la mejor manera el lenguaje para ser comprendidos. A partir de eso podríamos decir que escribir con claridad, se trata de escribir con un mayor control de las ideas expresadas, así como de sus relaciones.
Entonces, podemos decir que la claridad es, por un lado, una propiedad de un texto, un argumento o un comentario y, por otro lado, es una habilidad de las personas para comunicarse. Al ser una habilidad puede aprenderse y desarrollarse, y por lo tanto quien la aprenda pueda producir textos o argumentos con la propiedad de ser claras, y puede también tener la capacidad de pedir a otra persona que un texto o lo que nos dice sea más claro y entendible.
Algunos teóricos han trabajado la claridad, desde las teorías de la argumentación y la comunicación. Por ejemplo, Paul Grice en Lógica y conversación (1975), habla de que en cada acto comunicativo hay un “principio de cooperación”, es decir, que cada vez que hablamos con otras personas diariamente, siempre se tiene algún propósito compartido que son “esfuerzos de cooperación” para comunicarnos. Estas son reglas implícitas que nos ayudan a que la conversación funcione entre ambas partes. Grice clasifica los principios de cooperación en 4 máximas:
- Principios de cantidad:
- Que lo que diga sea tan informativo como se requiera.
- No dar más información de lo necesario.
- Principios de calidad:
- Que la información que dé sea verdadera.
- No decir nada que pueda ser falso.
- No decir aquello de los que no tengas pruebas suficientes.
- Principios de relación:
- Ir al grano, es decir ser relevante.
- No desplazar el foco de atención hacia cuestiones que no sean útiles o valiosas para el tema que se está conversando.
- Principios de modo:
- Ser claro.
- Evitar ser ambiguo al expresarse.
- Ser escueto, pero no tanto que no se entienda.
- Hablar con orden.
¿Por qué es importante saber expresarse con claridad?
Poniendo en práctica estos cuatro principios, la comunicación se puede llevar a cabo de manera más eficaz, evitando ambigüedades, haciendo a un lado ideas confusas, aportaciones sin importancia y el desorden. Cuando esto no sucede así y se rompen los principios de cooperación por parte de uno o ambas personas que intentan comunicarse, pueden provocar equívocos, malentendidos, pudiendo caer en falacias. Estas últimas entendidas como falsos razonamientos o un argumento que parece válido, pero no lo es.
En estos tiempos, resulta muy importante que los niños aprendan a pensar, hablar y escribir con claridad, primero para ser capaces de ordenar sus pensamientos y de expresarse de manera que otras personas comprendan lo que tengan intención de comunicar. Esto puede tener un gran impacto en su desarrollo escolar, relaciones personales y en general en todos los ámbitos de su vida. Segundo, porque podrán saber cuándo se enfrenten a textos o argumentos poco claros, pudiendo identificar faltas a la comunicación, cuando existan falacias, o cuando un texto o argumento tenga intenciones de confundir o engañar.
¿Cómo lo trabajamos en Smartick?
Desde el método Smartick, tenemos como objetivo que los niños trabajen habilidades y disposiciones del pensamiento crítico, entre ellas: la capacidad de “clarificar el significado” de lo que se dice o se escribe, descrita por The Delphi Report (1990). Queremos que los niños con la práctica sean capaces de encontrar mejores ejemplos que clarifiquen lo que quieren decir, que disminuyan las ambigüedades al hablar, pero también que tengan la disposición de ser claros, formular mejor la construcción de problemas y ser más preciso en la información que proporcionan.
Para trabajarlo, nos basamos en cuatro formas de intervenir sobre un texto (o argumento) para que el niño corrija lo necesario, haciendo que el texto sea mejor de cómo se presentó en un principio:
- Qué se puede omitir o borrar (borrado)
- Qué hay que añadir (adición)
- Qué reacomodos son necesarios (permutación)
- Qué reformulaciones mejorarían el texto (substitución)
Borrado: Implica saber eliminar los elementos redundantes, superfluos, pero no necesariamente irrelevantes, para el propósito de los que se quiere comunicar. Para llevarlo a la práctica tenemos actividades donde hacemos que los niños se pregunten: ¿Qué sobra en el texto? ¿Qué debemos borrar para que sea más claro?
Adición: Se trabajan ejercicios haciendo explícitos elementos implícitos o añadiendo ejemplos o lo que haga falta para que lo que se diga sea más comprensible.
Permutación: Se trata de ordenar y reacomodar los elementos para que hagan que el producto final sea lo más claro posible. En este ejercicio se debe ordenar las partes de una respuesta dentro de una conversación para que se comprenda correctamente.
Sustitución: Tiene la intención de reemplazar las afirmaciones ambiguas o vagas por frases bien definidas y más precisas o incluso más apropiadas técnicamente. Esto la trabajamos a partir de breves conversaciones cotidianas donde pueden cambiarse palabras ambiguas (la cosa, eso, algo) por algunas más exactas en relación a lo que se quiere comunicar.
Por último, ayudamos a que aprendan a verificar todas las razones por las que un texto no es claro y así vayan practicando ya no solo a escribir o hablar claramente, sino a identificar por qué un texto no es suficientemente claro.
¿Cómo podemos practicar la claridad en casa?
A partir de todo lo visto anteriormente, cuando tengas una conversación que no es clara o estés escribiendo o leyendo algo de otra persona, ten presente las siguientes preguntas:
- ¿Qué sobra o se podría quitar en lo que dice?
- ¿Qué se podría añadir para ser más claro?
- ¿Necesita un ejemplo para que se comprenda?
- ¿Si se dice en otro orden podría comprenderse mejor?
- ¿Hay algo ambiguo o que pueda tener más de un significado?
En conclusión, saber comunicarnos con claridad, no es nada fácil, pero con práctica y comprendiendo qué es lo que hace que un argumento o un texto sea claro, nos ayudará a que logremos hablar con claridad y pedir que otros con los que conversemos lo hagan de la manera más clara posible. Esperamos que esto te ayude a reconocer a la claridad como algo relevante y de valor en cualquier acto de comunicación.
Por último, te dejo un vídeo donde puedes reflexionar un poco más sobre la importancia de escribir y pensar con claridad.
Si te parece interesante seguir aprendiendo sobre cómo hablar y escribir con claridad y mejorar las habilidades y disposiciones de pensamiento crítico, ¡regístrate en Smartick Thinking, pruébalo gratis y no dejes de leer este blog!
Bibliografía
- GRICE, Paul. 1975. “Lógica y Conversación”. La búsqueda del significado, comp. Luis M. Valdés Villanueva, Madrid: Tecnos. 511-530.
- FACIONE, P (1990). «Critical Thinking. A Statement of Expert Consensus for Purposes of Educational Assement and Instruction«. CAP: California. (Delphy Report) https://www.insightassessment.com/wp-content/uploads/ia/pdf/DEX-2014-reprinting.pdf
Para seguir aprendiendo:
- Reto Smartick Thinking: ¿Sabes distinguir una falacia?
- Diálogo: ¿Qué ocurre cuando conversamos?
- ¿Qué es la lógica y por qué mi hijo debe trabajarla?
- Habilidades de redacción: Qué aspectos podemos trabajar y cómo mejorarlas
- Comprender lo que leemos es esencial en la escuela