El colegio Chamberí de Maristas fue de los primeros centros que introdujo Smartick en la rutina del aula de los niños de primaria. Que Octavio Saez, el director, nos cuente a menudo cómo lo van haciendo los niños es una de las satisfacciones que tenemos en el equipo. Aquí, le preguntamos por la experiencia.
Pregunta. —¿Qué importancia le dan a las matemáticas en su colegio?
Respuesta. —En nuestro Proyecto educativo las matemáticas, junto con los idiomas y las nuevas tecnologías, ocupan un lugar central. Las matemáticas para nosotros son un instrumento eficaz, un modo de pensar, de percibir lo real, en el sentido más amplio, una disciplina que educa la atención, la voluntad, en fin, la mente. A lo largo del tiempo, hemos observado que aquellos alumnos que tienen un buen cálculo mental, tienen desarrolladas la competencia matemática y lingüística, logran mayores niveles de excelencia y afrontan las dificultades con mayor confianza. Hay sin duda una alta correlación entre desarrollo competencial en matemáticas y buen rendimiento en otras materias.
P. —Creo que el centro participa asiduamente en olimpiadas…
R. —Sí, es una manera que tiene Chamberí de cuidar e incentivar el nivel de exigencia. Hemos participado con éxito en las Olimpiadas de Matemáticas, de Biología, de Geografía, de filosofía. Me resulta muy gratificante observar cómo trabajan, qué alto es su nivel de concentración, cómo sólo existe en su campo atencional lo que están haciendo. El mundo que les rodea desaparece y sólo está su tarea.
P. —¿Cómo ha sido la incorporación de Smartick en las aulas?
R. —Hemos ido adquiriendo las tabletas a medida que se ha ido implantando en los diferentes niveles. Del mismo modo que hemos ajustado la calidad-precio de las tabletas. La realización de la actividad estaba, al principio, obligada por el número de carros con tabletas por planta. Ahora ya se realiza en función de la actividad de cada uno de los cursos. Siempre a la misma hora ayuda a la incorporación en la “rutina” diaria.
P. —¿Qué opinan los profesores?
R. —Están contentos. Al principio, como en toda innovación, hay algunas resistencias y miedos. Más tarde las objeciones son para mejorar el rendimiento de la actividad y son fruto de la experiencia del día a día. Ahora buscan la forma de integrar aún más la herramienta al desarrollo del currículo.
P. —¿Cómo está de implantado ahora mismo Smartick?
R. —En los tres primeros cursos de Primaria y tercero de Infantil, el 100%. En los otros cursos entre 90 y el 95%.
Muchas gracias al Colegio Chamberí Maristas, a sus directivos, profesores y por supuesto, alumnos Smartick.
Para seguir aprendiendo:
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