¿Qué es comprender lo que leemos en un texto?
Para comprender lo que leemos los mecanismos involucrados son generales, es decir, son los mismos para un texto narrativo que para los que aparecen en los libros de texto de la escuela. Los primeros cuentan historias que suceden a personajes mientras que los segundos exponen conceptos o ideas que deben aprenderse.
En ambos casos se debe establecer un tema y un marco espacial y temporal de la información que se desea transmitir. Así mismo, se detallan los personajes o los elementos implicados, la situación de la que se parte y a dónde llegar.
Esto se aplica a casi todos los tipos de textos: una historia real, de ficción, un artículo periodístico o un enunciado de un problema matemático. Es muy importante que los niños comprendan bien lo que leen para adquirir los conocimientos necesarios para progresar en la escuela.
Cuando leemos debemos realizar una representación mental de la información e ideas que aparecen en un texto. De esta manera podremos detectar y comprender el propósito del autor.
La importancia de la identificación de las palabras escritas
Lo específico de la lectura es la decodificación de las palabras; el resto es lenguaje y conocimiento del mundo. Cuando hablamos de comprensión lectora es necesario, en primer lugar, aprender a identificar rápidamente y con precisión las palabras escritas en un texto. Si esta tarea se logra hacer casi automáticamente mucho mejor para el lector. Así podrá centrar su esfuerzo de atención en el trabajo de comprensión del texto que esté leyendo.
Sin embargo, si la identificación de las palabras es rápida y precisa pero la comprensión es deficiente se puede decir que existe realmente un problema de comprensión. Aunque esto no quiere decir que haya un déficit de comprensión que sea sólo para la lectura.
¿Qué significa comprender mal?
La lectura de un texto para su comprensión exige una capacidad importante de integración de la información. No se trata de intentar comprender lo que leemos yuxtaponiendo informaciones o ideas sucesivas dejando en medio pasajes sin comprender bien, sino de lograr una interpretación coherente de la totalidad del texto leído.
Muchos estudios científicos han mostrado que cuando sabemos leer fluidamente un texto pero su comprensión es deficiente, el problema de comprensión es de carácter general. Es decir, el problema se observa tanto al leer como al escuchar la misma información por vía oral. Por esta razón conviene trabajar la comprensión por ambas vías. Lo más habitual es tratar de resolver el problema más urgente y ayudar al alumno a adquirir una suficiente habilidad en la identificación de palabras. De hecho, suele resultar más difícil ayudar a los alumnos que tienen dificultades en la comprensión oral, que afecta también a la lectura.
Cómo mejorar la comprensión
Los textos deben ajustarse lo más posible a los conocimientos previos del alumno. Para que comprendan lo que leen también hay que tener en cuenta la complejidad de las construcciones gramaticales del texto. Tenemos que adaptarlas al nivel de desarrollo cognitivo y lingüístico que corresponda al niño. Esto ayuda a hacer deducciones e inferencias sobre el texto con más facilidad.
Por ejemplo, en las situaciones de lectura autónoma, la comprensión es todavía relativamente limitada al comienzo del tercer año de la Educación Primaria. Así, es frecuente que ante un texto narrativo de unas 15 líneas la gran mayoría de los estudiantes sean capaces de recuperar una información literal de lo que dice el texto. Sin embargo, pocos podrán realizar inferencias y sólo alrededor de la mitad será capaz de captar el sentido global de lo leído. Estos datos indican que la comprensión no es una competencia homogénea. En realidad, consta de niveles y fases en su desarrollo y dominio.
¿Cómo pueden ayudar los maestros y profesores?
Maestros y profesores deben ser conscientes de los diferentes aspectos que abarca la tarea de comprensión de los textos escritos. La recuperación literal de la información, la captación del sentido general o la integración coherente de información diversa están en la base de una buena comprensión. Son claves para realizar inferencias correctas sobre un texto.
Así pues, los docentes deberán de realizar el trabajo de comprensión con los alumnos en pequeños grupos, suscitando la capacidad de hacerse preguntas sobre lo que han leído, favoreciendo las interacciones con ellos y entre ellos y sugiriéndoles estrategias para llegar a comprender mejor un texto.
Para comprender lo que leemos las estrategias dependen de la práctica, del grado de familiaridad y nivel de conocimiento previo sobre lo que se dice en un texto. Por ejemplo, un niño que esté interesado en los dinosaurios y vea todos los documentales que ponen sobre ellos por la televisión, seguramente estará más capacitado para identificar la información relevante que lea. Será capaz de relacionar mejor la información nueva con lo que ya conoce. Además, es útil comenzar prestando atención al título y echando una ojeada general al texto y su organización interna, leyendo selectivamente algunas partes de éste. Estas estrategias las utilizan muy frecuentemente los buenos lectores.
En general, los estudios que han evaluado los efectos de las estrategias de comprensión en la lectura de textos muestran que éstas son positivas incluso en los lectores menos hábiles. Puedes aprender más sobre este problema leyendo este artículo.
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Para seguir aprendiendo:
- Objetivo de la lectura: de la automatización a la comprensión lectora
- Comprensión lectora: qué es, técnicas y ejercicios
- La importancia de implementar ayudas en la comprensión de textos
- Actividades de comprensión lectora en textos expositivos
- Cómo realizar un esquema a partir de un texto expositivo
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