La educación primaria es una etapa clave en el desarrollo académico y personal de los niños. Durante estos años, no solo adquieren conocimientos básicos, sino que también desarrollan habilidades sociales, emocionales y cognitivas esenciales para su futuro. Completar esta etapa de manera exitosa asegura una base sólida para enfrentar los desafíos académicos posteriores y, a largo plazo, contribuye a su integración social y laboral.
En este post hablaremos del abandono escolar temprano en España, sus causas y posibles soluciones.
Índice
Abandono escolar temprano
El abandono escolar temprano es uno de los problemas más preocupantes para el sistema educativo español. Es una desventaja para los jóvenes que abandonan los estudios pero también lo es para el progreso económico y social de España. Se define el abandono escolar temprano como la tasa de jóvenes de entre 18 y 24 años que dejan los estudios tras completar, como máximo, la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), sin seguir con ningún tipo de formación. Es un problema muy característico del sistema educativo español, comparado con la media europea, y lleva muchos lustros siendo así, sin que la preocupación que genera la publicación de indicativos educativos se haya traducido en una batería de medidas políticas que hayan surtido efecto.
Justo es decir, sin embargo, que sí se ha logrado alguna mejora, pero continúa siendo un desafío para las autoridades educativas, nacionales y regionales. Además, existen grandes disparidades entre las diferentes comunidades autónomas y entre géneros, con los varones presentando tasas más altas de abandono que las mujeres. Sin embargo, esa brecha de género en el abandono escolar temprano no genera los titulares que sí producen otras diferencias. Por eso, en el curso 23/24 en Smartick decidimos sacar a la luz ese problema en la campaña de La Vuelta al Cole con el diseño de una lona que ponía el acento en esa brecha.
La situación del abandono escolar temprano en España
España sigue ocupando, a su pesar, lo más alto del medallero en el abandono escolar temprano en la Unión Europea, sólo por detrás de Rumanía. Según los datos de Eurostat, en 2022, España tenía una tasa de abandono escolar temprano del 13,9%, una mejora respecto a años anteriores, pero aún muy por encima de la media europea, que se situaba en torno al 9%. La tendencia es positiva pero continúa en una cifra de doble dígito inédita en otros países de nuestro entorno.
En comparación con países como Finlandia o Alemania, donde las tasas de abandono escolar son muy bajas (por debajo del 5%), España muestra una necesidad urgente de seguir reduciendo estos números. En cambio, países como Italia y Portugal tienen tasas de abandono más cercanas a las de España, lo que sugiere que las economías del sur de Europa podrían compartir ciertos factores socioeconómicos y culturales que dificultan una mejora más rápida en este ámbito.
¿Cuál es el secreto de las cifras de un país como Finlandia? Desde que este país destacara en el informe PISA, siempre se ha señalado como un factor de su éxito la prontitud con la que atienden a los alumnos que requieren un refuerzo escolar. Si el profesor detecta que tiene alumnos en clase que necesitan un empujón para ir al ritmo del resto del aula, el centro educativo pone recursos para que lo consigan.
En España hay iniciativas como el programa PROA de refuerzo escolar y este año se han anunciado clases de apoyo en matemáticas y en lectura, justo las dos competencias en las que nos centramos en Smartick porque sabemos de su importancia para el éxito educativo. LA OCDE suele promover seminarios en los que se trata de posibles mejoras para atajar la tasa de abandono escolar temprano. Y, recientemente, incluso la OCDE ha aconsejado a España que potencie la jornada escolar partida.
Causas del abandono escolar temprano en España
El abandono escolar temprano, como todo fenómeno sociológico, obedece a multitud de factores y se puede explicar por uno solo. Aquí, señalaremos los más relevantes.
Factores socioeconómicos
El contexto socioeconómico de los alumnos es uno de los determinantes que explica mejor el abandono escolar. En España, los jóvenes que vienen de familias con escasos recursos y con progenitores con una formación muy limitada tienen más posibilidades de abandonar los estudios. La falta de dinero puede explicar, por ejemplo, que no se tenga acceso a clases particulares, uno de los gastos que más aumenta desde hace años en los hogares, según un estudio de EsadePol.
También tiene su peso lo que se llama el capital cultural. Familias, por ejemplo, que saben cómo ayudar a sus hijos con los deberes, que ocupan una parte no desdeñable de las tardes.
Además, en lugares con una economía muy precaria, puede ocurrir que las familias empujen a sus hijos a colaborar en la economía doméstica y a abandonar la escuela. Sería interesante profundizar en la radiografía por sitios y colectivos en lo que esto puede ocurrir. Para evitarlo, en comunidades como en Andalucía se pusieron en marcha programas de becas para bachillerato, sin que se haya evaluado de manera exhaustiva su funcionamiento.
Factores escolares
Puede ocurrir que las dinámicas del mismo sistema educativo se hagan más duras para un perfil de alumnado. Las horas, los exámenes y las técnicas de estudio se pueden hacer más complicadas a muchos estudiantes, que sienten una desconexión emocional y académica ante los requerimientos de la escolarización, sin que cuenten en sus casas con incentivos para animarles a comprender la importancia de la educación.
También puede pasar que haya estudiantes con dificultades de aprendizaje, como aquellos con dislexia, discalculia o déficit de atención, que no cuenten con los recursos necesarios en el centro educativo para atender sus necesidades.
En la actualidad, el número de alumnos con necesidades educativas especiales aumenta exponencialmente y la ratio y las cargas burocráticas, entre otras, de los profesores hacen muy complicada la atención personalizada en unas aulas cada vez más diversas.
Consecuencias del abandono escolar temprano
¿Por qué perjudica tener la tasa de abandono escolar temprano de España?
Consecuencias individuales
Las oportunidades laborales para los que dejan de estudiar son mucho más limitadas y precarias. Hay pocos empleos de calidad sin un título de educación secundaria. Los salarios son más bajos y la temporalidad más alta. Obviamente, eso afecta a sus salarios y suelen estar más en riesgo de acabar en el desempleo. Se ceba así un círculo vicioso en la educación porque, como ya hemos visto, los hijos de los que tienen menos estudios tienen menos posibilidades de llegar a la universidad.
Es así como se ceban los ambientes de exclusión social y hace que en demasiadas ocasiones sean las mismas familias las que se conviertan en carne de cañón de estadísticas de conductas peligrosas, consumo de estupefacientes, desempleo, nulo acceso a vivienda de calidad, por ejemplo. Además, con un entorno administrativo cada vez más complejo y unos requerimientos de acceso a la tecnología más presentes en el día a día, estas personas pueden aumentar su sensación de estar fuera del sistema.
Consecuencias económicas
Sin mano de obra cualificada, la competitividad de un país se resiente. Además, su sistema de bienestar social estará más presionado por la dedicación que se presta a los distintos problemas que pueden presentar familias sin estudios.
Reducir el abandono escolar temprano en España es un desafío multifacético que requiere la cooperación de todos los sectores de la sociedad, desde el gobierno hasta las escuelas, las familias y la comunidad en general. Las soluciones deben enfocarse en abordar tanto las causas socioeconómicas como los factores educativos y culturales que contribuyen a este fenómeno. A continuación, se presentan algunas estrategias clave que podrían ayudar a mejorar la situación.
Soluciones al abandono escolar temprano en España
Políticas educativas más inclusivas y personalizadas
Una de las formas más efectivas de reducir el abandono escolar es invertir en un sistema educativo más inclusivo que ofrezca apoyo personalizado a los estudiantes en riesgo. Esto puede lograrse mediante:
- Refuerzo escolar individualizado: Crear programas de apoyo académico para estudiantes con dificultades de aprendizaje, como clases de refuerzo, tutores o mentorías que los ayuden a mejorar su rendimiento académico y a sentirse más motivados para continuar sus estudios. Smartick es lo que hace con miles de familias a diario.
- Prevención del abandono desde edades tempranas: Identificar a los estudiantes en riesgo desde etapas iniciales, utilizando sistemas de alerta temprana que ayuden a detectar signos de desmotivación o bajo rendimiento. Esto permitiría intervenir antes de que el problema se agrave.
- Mayor flexibilidad en el sistema educativo: Adaptar los itinerarios académicos para que los estudiantes puedan elegir caminos formativos más acordes a sus intereses y capacidades. La creación de alternativas como la Formación Profesional (FP) dual, que combina el estudio con prácticas en empresas, es un ejemplo de cómo se puede ofrecer una educación más práctica y atractiva para aquellos jóvenes que no desean seguir un enfoque estrictamente académico.
Aumento de la inversión en recursos educativos
Para combatir el abandono escolar, es necesario destinar más recursos al sistema educativo, especialmente en las regiones con mayores tasas de abandono. Esta inversión podría enfocarse en:
- Reducción del número de estudiantes por aula: Esto permitiría una atención más personalizada y aumentaría la capacidad de los docentes para detectar problemas a tiempo. Es algo que está llegando con el descenso de la demografía.
- Formación continua para docentes: Ofrecer programas de formación para profesores, enfocados en nuevas metodologías pedagógicas y en la gestión de aulas diversas, con estudiantes que presenten diferentes ritmos y estilos de aprendizaje. Es así como Gran Bretaña, por ejemplo, ha mejorado en matemáticas.
- Los mejores docentes, en la zona de riesgo de fracaso. Es una técnica que se ha aplicado en distintos países o con organizaciones como Teach for All.
Implicación de la familia y la comunidad
El papel de la familia es crucial en la prevención del abandono escolar. Es esencial establecer una relación sólida entre las familias y los centros educativos para que los padres se sientan parte activa en la educación de sus hijos.
- Escuelas de padres: Implementar programas de formación para padres, especialmente en comunidades en riesgo, donde se les ofrezcan herramientas para apoyar a sus hijos en el proceso educativo.
- Mayor participación comunitaria: Desarrollar programas que involucren a la comunidad en la educación, como asociaciones de vecinos, empresas locales que puedan ofrecer apoyo extracurricular, orientación profesional o prácticas laborales.
Reformas a nivel nacional y ejemplos europeos
España puede beneficiarse de estudiar modelos educativos exitosos en otros países europeos, que llevan a cabo estas prácticas.
- Programas de segunda oportunidad: Aumentar las oportunidades para que los jóvenes que han abandonado los estudios puedan reinsertarse en el sistema educativo, ofreciendo programas flexibles de formación y acceso a la titulación de la ESO para adultos.
- Alianzas entre el sector público y privado: Impulsar colaboraciones con empresas para promover la Formación Profesional y garantizar que los jóvenes puedan obtener experiencia laboral práctica mientras continúan su formación, como en el modelo de FP dual alemán.
Fomentar el valor de la educación
A largo plazo, es necesario cambiar la percepción cultural del valor de la educación. En muchas comunidades, especialmente en las más desfavorecidas, la educación no siempre se ve como un camino necesario para alcanzar el éxito. Para cambiar esto:
- Campañas de sensibilización: Lanzar campañas de concienciación que subrayen la importancia de la educación como motor de cambio personal y social. Estas campañas pueden enfocarse en mostrar historias de éxito de jóvenes que, a través de la educación, han mejorado su calidad de vida. Países como Singapur han demostrado el éxito de este enfoque.
- Orientación vocacional temprana: Proporcionar desde edades tempranas una orientación vocacional clara que muestre las diferentes opciones educativas y laborales disponibles, adaptadas a los intereses de los estudiantes, lo que puede aumentar su motivación para seguir formándose.
Conclusión
En definitiva, ayudaría que como país, se tomara nota en parte de lo que llevamos más de una década haciendo con las familias que confían en nosotros para conseguir que sus hijos alcancen el máximo potencial:
Más personalización. Ser capaces de detectar cuando un niño empieza a quedarse atrás y ponerle remedio. Nosotros lo hacemos con sesiones adaptadas a su nivel en matemáticas y en lectura. Esto beneficia también a los niños con necesidades educativas especiales.
Más constancia. Que los esfuerzos no sean puntuales, que requieran de un apoyo y trabajo continuo para que los alumnos puedan recuperar el nivel que les hará no fracasar.
Educación Primaria. Los recursos se han de poner en educación primaria, que es cuando se ponen los cimientos de la educación. Tanto en comprensión como en hábitos, algo que conocemos bien en Smartick.
Feedback inmediato. Una metodología como Smartick, donde se contesta de manera inmediata a los ejercicios planteados, es capaz de darle en matemáticas y en lectura un feedback inmediato a los alumnos sobre su progreso y evolución.
Evaluación. Para saber qué alumnos están en riesgo de quedarse atrás no nos podemos conformar con evaluaciones internacionales que ni siquiera son anuales. Deberíamos tener pruebas estandarizadas y calibradas para que cada centro tuviera una idea de cómo lo hacen sus alumnos respecto al resto.
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Para seguir aprendiendo:
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