El post de hoy lo hemos recibido esta mañana ¡¡escrito directamente por los Reyes Magos!!
Queridos abuelos:
No sé si os habéis fijado, pero las casas de vuestros hijos no son muy grandes. Los hay que incluso tienen que alquilar trasteros, un nuevo negocio que no imaginabais hace 40 años. Claro que, hace 40 años, no es que las casas fueran más grandes, algunas también, pero es que no había tantas cosas que regalar, las familias eran más numerosas y, bueno, no se tiraba tanto el crédito por la ventana. Hablando de eso. Hay cosas que pueden parecer caras pero que son baratas al medio y largo plazo. Nos lo explican muchas veces en Smartick.
En estas fechas en las que nos encontramos tenemos varias opciones: podemos hacer caso a las cartas que nos están enviando muchos de vuestros nietos, en las que nos ponen esos juguetes que se van agotando de los catálogos y los anuncios que llevan viendo desde hace meses. Bueno, es una posibilidad. Es verdad que la cara de los niños cuando abren ese regalo es en sí misma un regalo para vosotros. Pero, si sois realistas, en fin, ¿cuántos de esos niños siguen jugando con ellos llegado, por ejemplo, febrero? Muchos de esos juguetes luego van al altillo, al trastero de alquiler y los hay incluso que querrían tirarlos pero no pueden por los remordimientos.
Luego está la posibilidad de conseguir hacerles fuertes estos días a la presión de la masa. Ocasión idónea para enseñanza de las buenas. Que no, que no os estamos diciendo que se vuelvan unos budistas y que admiren el pie del árbol vacío. No somos tan radicales. Además, nos dejaríais sin viaje y sin trabajo y nosotros somos unos señores mayores muy animados. El pie del árbol siempre va a tener un regalo que se pueda abrir, tocar y jugar con él. Pero os comunicamos que también puede haber un regalo que hará que se acuerden con cariño de vosotros siempre. Vuestros hijos también, claro, porque al menos los niños estarán usando la tableta para algo útil y con un tiempo determinado.
Os explicamos. Esto requiere que hagáis con ellos cierta pedagogía. Les podéis contar que las satisfacciones más grandes son las que requieren esfuerzo y dedicación, aunque no lo vean ahora. Que, en la vida, es importante querer las cosas por lo buenas que sean no “porque les gusten a todo el mundo”, “porque todo el mundo tenga uno” y justificaciones parecidas. Si os animáis con esta segunda posibilidad, os recomendamos que nos pidáis que les regalemos Smartick. ¿¿¿Regalar matemáticas??? Ya os estamos viendo la cara. Pues sí. Eso sí que es un reto, ¿eh? ¿Seréis capaces de explicarles en una carta, en un sobre bonito, que los Reyes están regalándoles un futuro mejor?
Como a los Reyes Magos nos encanta escribir, os dejamos un boceto de la carta que podemos dejar para vuestros nietos junto con el regalo de las mejores matemáticas:
Queridos niños:
Ya sabemos que este regalo no estaba en vuestra carta, que ni se os había pasado por la cabeza. Justo por eso es un regalo muy especial. Vuestros abuelos nos pidieron que os regaláramos Smartick para que las matemáticas nunca fueran un obstáculo para vosotros. Si sois buenos con los números, tendréis siempre las puertas abiertas para poder ser de mayores lo que queráis: desde diseñadores de videojuegos a constructores de casas como las de Lego pero de verdad o ingenieras que hagan cohetes que por fin lleguen a Marte o quizás médicos capaces de curar epidemias. Este regalo se tiene que usar todos los días. Así, todos los días, conseguiremos que os acordéis de los Reyes Magos y de los abuelos que decidieron no haceros un regalo facilito. Que le dieron a la cabeza. Es un regalo para niños muy especiales. Matemáticas. Ja. Parece que estamos locos. Pero no. Pedidle a vuestros padres que os lo activen, ya se lo hemos explicado.
Feliz Navidad y 2017. Que es un número muy bonito. Como todos.
Para seguir aprendiendo:
- Regalos de Navidad: una ayuda para esos abuelos y tíos despistados
- ¡¡Smartick gana el premio Emprendedores XXI de La Caixa!!
- Incorporamos 200 cuentos a la biblioteca del CEIP Alberto Alcocer
- Los amigos de mis amigos
- “Como nos informamos de kumon, nos pareció que Smartick estaba bien de precio”
