Es bien sabido que las virtudes que impulsan al hombre hacia su autorrealización convergen en un mismo punto: los hábitos. La virtud de la concentración también necesita ser alimentada día a día para que sus semillas acaben dando sus frutos en las diferentes parcelas de la vida.
Padres y madres, ha llegado el momento de que otorguéis el superpoder de la concentración a vuestros peques:
- Gym mental. Recuerda que el cerebro es un músculo que necesita ejercitarse diariamente para poder funcionar a su máxima potencia. Hay infinitas formas lúdicas para entrenar a nuestro cerebro: puzles, rompecabezas, sopa de letras, colorear mandalas. Pero el rey de todos ellos es ¡el ajedrez!. A parte de proporcionarnos una gran dosis de concentración y atención, también aporta granitos de planificación, organización, creatividad, pensamiento lógico formal, cálculo, raciocinio…simplemente, ¡es mágico!
- Establece retos diarios y semanales. La planificación es una herramienta útil para incentivar y favorecer la motivación intrínseca al ver los pequeños avances que se van consiguiendo.
- Encuentra su momento ideal. Cada persona tiene su momento óptimo de rendimiento en una franja de tiempo determinada. Detecta en tu pequeño ese rato de máxima concentración y aprovecha para realizar sus deberes.
- Da un respiro a su cerebro. Los descansos forman parte del largo camino del aprendizaje, con su ausencia corremos el riesgo de que el cerebro se sature y acabe perdiendo concentración y lucidez…”Sentarse, respirar y volver a seguir”, ese es el plan.
- Elimina las moscas voladoras. En el momento de hacer las tareas escolares es importante apartar de la vista del pequeño todos aquellos estímulos que le inviten a la distracción (aparatos electrónicos, juguetes, ruidos…).
- “Mens sana in corpore sano”. Educa a tu hijo en una vida sana:
- Comer de una manera equilibrada, con el predominio de verduras y legumbres.
- Tener buena higiene del sueño para conseguir que sea reparador.
- Practicar deporte regularmente.
- Alejarse de tablets y ¡salir a jugar al parque!
En Smartick sabemos de la importancia de los buenos hábitos y la concentración. Por eso nuestras sesiones diarias de matemáticas duran solo 15 minutos, para que sea fácil incorporar Smartick en la rutina diaria y porque los esfuerzos son más efectivos si son cortos y con concentración máxima.
“Concentración y Simplicidad. Lo simple puede ser más difícil que lo complejo. Tienes que trabajar duro manteniendo tu mente clara para hacer las cosas simples. Vale la pena llegar hasta el final con esto, porque cuando terminas puedes mover montañas”
-Steve Jobs-
Para seguir aprendiendo:
- Cómo ayudar a que tus hijos afronten la competición deportiva de la mejor manera posible
- Metodología de Smartick: ¿qué aprenden los alumnos?
- Con las matemáticas, igual que con el deporte
- El poder de la positividad en la educación
- «Me recomendaron Smartick para mejorar la atención de mi hijo»
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