Ayer fue un día de alegrías. Empezaba el campamento Smartick de matemáticas y tecnología para niñas y nos encontramos, de entrada, con niñas veteranas, que repetían del año pasado. Les preguntamos si el sitio les gustaba más y, claro, el Colegio Madrid, con su patio y pequeño jardín, les ha parecido estupendo. Volvimos a comprobar que son unas niñas que se portan fenomenal y nos dieron ganas de empezar con un cálculo de probabilidades porque, de 30, tenemos a cinco que se llaman Martina.
También hay alumnas de Smartick. De hecho, tenemos a niñas que llevan cuatro años practicando matemáticas y aprendiendo con nosotros y, por eso, nos encanta que el campamento nos dé la oportunidad de ponerles nombre, cara y ojos.
Susana dio la bienvenida y cada una se hizo un cartel con su nombre, para que sea más fácil para todos aprendérnoslos. Después, hicieron su sesión de Smartick, para luego experimentar con juegos matemáticos de Marisa.
Después, vino la arquitecto María Hurtado de Mendoza a hablarle de las formas de los matemáticas. María se fue hasta Pitágoras y habló de los números pitagóricos. En ese momento, una de las niñas le explicó que en Smartick, el primer diploma lo da Pitágoras. Escuchar eso nos gusta porque una de las labores que pretendemos hacer con los diplomas es que los niños se familiaricen con los grandes nombres de las matemáticas.
María les aconsejó que, desde hoy, cuando vean formas también vean números y les habló de la geometría. Les preguntamos a las niñas por el nombre de las instalaciones donde aparcaban y llegaban los aviones, para explicarles que también los arquitectos no solo hacen casas sino que también se encargan de diseñar los aeropuertos. Pero entonces fue cuando una de ellas nos contestó que “también aparcan en los portaaviones”. Y tiene razón. Este año no hemos invitado a ninguna ingeniera naval, pero lo pensaremos para el que viene.
Después llegó el turno de los robots y de los experimentos con Carmen, Mari Paz y Beatriz. Les preguntaron si los robots eran inteligentes o tontos y se escuchó a una de las niñas decir que “depende de quién los programe”.
Mañana seguro que tenemos más contestaciones de ese tipo. Las contaremos.
Para seguir aprendiendo:
- Campamento tecnológico Smartick: maravilloso día 1
- De motores, corazones y experimentos
- Teorema de Pitágoras: Qué es, algunas demostraciones y ejemplo de aplicación práctica
- El Campamento Smartick en el informativo de Televisión Española (TVE)
- Un campamento Smartick para despertar vocaciones tecnológicas en las niñas
