Matemáticas, juegos y diversión: experiencias Smartick

Contar experiencias reales de usuarios de Smartick: esa es la mejor forma de mostrar cómo funciona nuestro método y cómo puede ayudar a tus hijos a superarse tanto en matemáticas como en su rendimiento cognitivo en general. Te presentamos a María Parejo, mamá de Javier y Marta, niños Smartick.

¿Cuánto tiempo llevan tus hijos haciendo Smartick?

Javier (9 años, 4º de primaria) lleva desde noviembre del 2010 haciendo Smartick y su hermana Marta (7 años, 2º de primaria) desde mayo del 2011.

Creo que el otro día te llevaste una sorpresa por algo que escribieron sobre internet…

Efectivamente, me sorprendió la respuesta de mi hijo Javier cuando en un examen de Conocimiento del Medio le pidieron que explicase qué era Internet, si utilizaba alguno de sus servicios y cuál. Literalmente respondió «Es un medio de comunicación social de las nuevas tecnologías. Sí. Smartick, que es un programa donde hago mates on line y, cuando termino, juego«. A pesar de llevar más de 3 años y medio haciendo Smartick, a él no le resulta algo aburrido ni lo ve como una obligación, sino todo lo contrario, como algo divertido, como un juego.

¿Notas que desde que hacen Smartick tus hijos han mejorado en algo más que en matemáticas?

Sí, principalmente en seguridad. Javier tiene déficit de atención y sin embargo, durante los 15 minutos diarios de Smartick está totalmente atento, su constancia le ha llevado a ser muy rápido en matemáticas, sobresaliendo sobre muchos de sus compañeros. Ese ser mejor en una de las asignaturas más difíciles le ha servido para demostrar a los demás que ser despistado no es sinónimo de ser torpe.

¿Cuál es la rutina, cómo y cuándo lo hacen?

Marta lo hace siempre antes de los deberes y Javier cuando los termina. Los fines de semana, siempre lo hacen después de desayunar.

¿Qué es lo que más les gusta?

Que pueden jugar después de hacerlo, con los juegos de la plataforma.

¿Te cuesta explicar a vuestros amigos en qué consiste Smartick?

Sí. Estamos preparados para mandar a nuestros hijos a una academia de inglés o ponerles un profesor particular si lo necesitan, pero todavía no lo estamos para apuntarlos en un programa no pirateado y «sin necesitarlo» el niño.

¿Has tenido alguna reacción de los profesores?

Las profesoras que ha tenido Javier están sorprendidas de sus conocimientos, rapidez y seguridad en las matemáticas. A Marta le pasa lo mismo, no es habitual que una niña de 7 años haya aprendido a multiplicar y dividir «sola».

¿Crees que en general la gente es consciente de la importancia de las matemáticas?

Rotundamente, no.

En Smartick tenemos como uno de nuestros propósitos cambiar ese «rotundamente, no». Vivimos en un mundo cada vez más tecnológico y eso significa que está muy basado en las matemáticas, por eso pensamos que los padres preocupados por que sus hijos tengan las mejores herramientas para enfrentarse al futuro saben que es importante que sepan resolver problemas y que tengan soltura con los números. Ese «rotundamente, no» de María nos obliga a seguir con más constancia en nuestro empeño.

Para seguir aprendiendo:

• “Smartick le ha aportado autoestima a mi hijo”
• Un año y medio con Smartick
• «Los niños que hacen Smartick son conscientes de la importancia de las matemáticas»
• «Cuando lo dan en el colegio ya lo han trabajado antes con Smartick»
• «Fallar es también parte del aprendizaje»

La diversión es la forma favorita de aprender de nuestro cerebro

Diane Ackerman

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• 15 minutos diarios
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Berta González de Vega

Cree que no sabe ser más que periodista y, por curiosa, anda ahora entusiasmada leyendo sobre la enseñanza de las matemáticas, de la comprensión lectora y de educación en general. Si se le hubieran dado mejor los números, puede que hubiera sido médico, como su padre y como su abuelo. Pero, además de sentirse apabullada por las derivadas, se le cruzó un reportaje de la revista Rolling Stone aquel año que pasó en Seattle. Domina el inglés y nunca pensó en las matemáticas como en el verdadero lenguaje universal. Es trotadora de paseo marítimo de Torremolinos y tiene tres hijos que coleccionaron ticks de Smartick: Pablo, Luis y Berta.

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