A Carolina la conocimos en el Campamento Smartick del pasado verano. Dibuja muy bien, habla con gran precisión para su edad y nos dijo que, de pintores, le gustaba mucho “Pollock”, lo que nos causó gran impresión. Además, que se pasaría “la noche entera sin dormir y dibujando”. Y, sobre su hermano, que “no se entera de nada”. Pero es que, nos dijo al día siguiente, es todavía muy pequeño. Tanto como para no poder hacer Smartick. Aquí, nos contestan sus padres, Rubén y María.
¿Cómo conocisteis Smartick?
No lo recuerdo muy bien. Por Internet, investigando sobre posibles métodos para que Carolina aprendiera matemáticas.
¿Por qué pensasteis que a Carolina le vendría bien un extra de matemáticas?
En realidad, no empezó como un extra, primero lo intentamos con el Método Doman pero llego un momento en que nos resultó complicado seguir con él y fue cuando decidimos buscar alternativas.
¿Sois una familia especialmente concienciada con la importancia de las matemáticas?
No solo las matemáticas, si algo nos tendría que definir quizás seria que somos una familia especialmente concienciada con la importancia del desarrollo en los primeros años de vida de los niños. Y las matemáticas son solo un aspecto más.
¿Habéis conseguido que hacer Smartick sea parte de la rutina?
Hemos conseguido que lo haga casi todos los días, pero tenemos que recordárselo siempre. Casi nunca lo hace por su propia iniciativa.
¿Os dice algo de cómo se siente con los números en el colegio?
En el colegio siempre ha ido muy bien en todo por lo que no ha habido ningún comentario especial respecto a los números. Siempre hemos entendido que en matemáticas, gracias a Smartick, va por delante de lo que hacen en el colegio.
¿Qué es lo que más le gusta y lo que menos?
Si hablamos de Smartick lo que más le gusta son las series, en especial los «gusanitos». Lo que menos quizás sea avanzar por que tiene más fallos y le gusta acertar siempre.
¿En vuestro entorno entienden que os gastéis dinero en reforzar una asignatura que se da en el colegio?
Si, casi todo el mundo está muy concienciado con la educación de los niños y lo harían si pudieran. Pero no es un método para todos los bolsillos.
Si el pozo de las sugerencias os hiciera caso de inmediato, ¿Qué le pediríais a Smartick?
Le pediría que como complemento a los tutoriales los niños pudieran hacer ejercicios por su cuenta para practicar lo aprendido en el tutorial. A Carolina lo que más le frustra de Smartick es fallar. Por eso, creo que si los pudiera practicar sin la presión de ser en la sesión lo haría encantada. Y, por ejemplo, los juegos que hay en Smartick que se supone que son un complemento casi ni se los mira. En las sesiones, me gustaría que hubiera más ejercicios de repaso. Por ejemplo, los primeros cinco ejercicios se los pondría de materias que ya domina para que no las olvide y a su vez le sirva para potenciar su confianza.
Para seguir aprendiendo:
- “En casa, la rutina de Smartick es como lavarse los dientes”
- “Smartick ha hecho a mis hijos más ágiles mentalmente”
- “Cambiamos de Kumon a Smartick por la movilidad”
- “Smartick no iguala por abajo con las matemáticas»
- «Yo miro, oigo y callo. Hay que dejar que hagan solos Smartick»